Pero si en algún momento nos hemos sentido mas cercanos a Faustino y a su hermano Manolo, ha sido sin lugar a dudas desde que se retiraron de los escenarios, porque ellos nunca se han retirado del todo de la música, ya que no sabían vivir sin sus sevillanas, que mecían como nadie y con las que nos deleitaban en esas reuniones que compartíamos en la bodega de su compadre Baldomero en la Pañoleta.
Si esas paredes hablaran, volveríamos deleitarnos al escuchar el susurro de su voz parando el tiempo con unas salidas imposibles que solo él era capaz de hacer, y la complicidad con su hermano Manolo esperando el momento de tirar para arriba en los estribillos (como chiquillos que empiezan en las sevillanas), temas que nos cantaban una y otra vez "Toda una vida", "Y todo sigue igual", "Leyenda del Cachorro", "El Gran Poder vino a verle", "No te vayas Luna"... y una de sus preferidas "Hermanos", llenaban la bodega de complicidad, instantes irrepetibles que quedarán allí guardados para siempre.
Si esas paredes hablaran, escucharía esas palabras amables de Faustino que ha tenido con todos, en especial con Manolo Rincón cuando Faustino le decía "Manué, nadie nos ha tocado la guitarra como lo haces tu" palabras que ha sido el mejor piropo jamás recibido.
Si esas paredes hablaran, nos contarían la extraordinaria persona que ha sido, esa sencillez campechana y sincera humildad, ejemplo ha seguir para todos los que hemos tenido la suerte de conocerlos.
Si esas paredes hablaran, también nos contarían infinitas anécdotas que han vivido como artistas tanto en los escenarios como detrás de ellos, anécdotas graciosas, de acontecimientos mas solemnes, incluso algún chascarrillo, pero siempre desde la elegancia y sobre todo, jamás hablando mal de ningún compañero, ni persona alguna, al contrario, siempre que han hablado de alguien tanto Faustino como Manolo ha sido para mostrarnos lo mejor de cada persona.
Si esas paredes hablaran, dirían Faustino porque te has ido, quién nos cantará ahora, nos has dejado huérfanas, las barricas de madera ya no crujirán al compás de tu voz.
Faustino, cuantas veces os hemos cantado a ti y a Manolo en la bodega o en el Soberao, cuantas veces nos has cantado a nosotros junto a Manolo. Esas paredes ya no podrán escuchar tu voz, pero queda Manolo y tenemos que ayudarle a mitigar su pena, y esa será la encomienda que Marisma tendrá a partir de ahora.
Faustino, siempre estarás en el corazón de Marisma. Descansa en Paz Maestro, descansa en Paz amigo.
Si esas paredes hablaran, escucharía esas palabras amables de Faustino que ha tenido con todos, en especial con Manolo Rincón cuando Faustino le decía "Manué, nadie nos ha tocado la guitarra como lo haces tu" palabras que ha sido el mejor piropo jamás recibido.
Si esas paredes hablaran, también nos contarían infinitas anécdotas que han vivido como artistas tanto en los escenarios como detrás de ellos, anécdotas graciosas, de acontecimientos mas solemnes, incluso algún chascarrillo, pero siempre desde la elegancia y sobre todo, jamás hablando mal de ningún compañero, ni persona alguna, al contrario, siempre que han hablado de alguien tanto Faustino como Manolo ha sido para mostrarnos lo mejor de cada persona.
Si esas paredes hablaran, dirían Faustino porque te has ido, quién nos cantará ahora, nos has dejado huérfanas, las barricas de madera ya no crujirán al compás de tu voz.
Faustino, cuantas veces os hemos cantado a ti y a Manolo en la bodega o en el Soberao, cuantas veces nos has cantado a nosotros junto a Manolo. Esas paredes ya no podrán escuchar tu voz, pero queda Manolo y tenemos que ayudarle a mitigar su pena, y esa será la encomienda que Marisma tendrá a partir de ahora.
Faustino, siempre estarás en el corazón de Marisma. Descansa en Paz Maestro, descansa en Paz amigo.
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